sábado, 20 de junio de 2015

La náusea

Sin la pretensión de apropiarme del título del libro de Jean Paul Sartre, es lo que he sentido mientras leía las noticias del día 7 de mayo.
La primera arcada me vino cuando leía que en Burundi habían quemado vivo a un individuo colocando neumáticos en su cuello. Ni siquiera leí el desarrollo de la noticia. Pero la que terminó por casi provocarme el vómito fue la de que habían encontrado ahogado en una charca de Sa Coma, en Mallorca, al chimpancé fugado del zoo de esa localidad y que se llamaba Adán. Anteriormente la guardia civil había asesinado a la pareja hembra llamada Eva con la excusa de que no se podía reducir de otra forma y era un peligro para las personas...seguro que el que lo hizo habrá disfrutado con la hazaña, muy valiente, sí señor.
Náuseas me da pensar en la vida miserablemente injusta que han llevado estos dos animales tan nobles y bellos. Maltratados, en jaulas nauseabundas, exhibidos para diversión de cretinos e imbéciles. Arrancados de su medio para malvivir y morir de esta manera, sin ninguna oportunida, cuando los pobres creían conseguida otra vez su libertad. 
Esto me trae el recuerdo de lo alegremente que se maltratan los animales en España. Que sale gratis.

Estos animales, con una línea evolutiva muy parecida a la humana, son capaces de desarrollar relaciones afectivas, intelectivas y sociales muy superiores a muchos de los que nos decimos humanos. Pero, es que ellos no eligieron esa vida.
La primatóloga Jane Goodall, que ha estado casi toda su vida estudiando y conviviendo con los chimpancés en África, ha manifestado su asco por el trato que han recibido estos pobres animales y la fundación que lleva su nombre en Barcelona ha exigido una investigación. Recomiendo a todo el que pueda que lea algo de esta autora, yo leí en su momento "En la senda del hombre", en la versión española correspondiente a la colección biblioteca científica Salvat.


Una vida triste

Adán, ¿qué pensaría de los que le miraban al otro lado de las rejas?