lunes, 1 de mayo de 2017

Quiero ser como él

Ayer domingo escuché el programa de radio que tiene Michael Robinson en la cadena SER, los domingos de 13:00 a 14:00: Acento Robinson, concretamente la entrevista que le hizo a Víctor Tasende.
Cuando tenía 17 años, Víctor Tasende sufrió una rotura del cuello al chocar contra el fondo de la piscina a la que se tiró de cabeza. Esa tarde se había tirado varias veces sin consecuencias... hasta que ocurrió el accidente. Como él mismo relata en la entrevista, se quedó inmóvil en el fondo conteniendo la respiración hasta que le sacaron. Lo que siguió fue la inmovilidad en una cama y oír la terrible palabra: tetraplejia, parálisis del cuello para abajo. Cuenta que lo único que quería era morirse, pero ocultaba esos pensamientos a los demás para no preocuparles, mostrándoles una sonrisa a los médicos, a la familia...
Tenía 17 años y la soberbia típica de los adolescentes, de saberlo todo, y ahora se veía postrado en una cama mirando siempre al techo de su habitación. Dicen que cuando te ocurre algo tan terrible toda tu vida pasa por tu mente, sin embargo, dice Víctor que lo que pasó por su mente fue todo aquello que no había hecho y que nunca más podría realizar. Se dió cuenta de que no había vivido nada, pero dentro de todo lo negativo que le había pasado afloró todo aquello positivo que le había trasmitido su abuela. 
Pasado algún tiempo tuvo un pequeño movimiento en el dedo meñique de su mano, fue el comienzo de una recuperación milagrosa, ya que su lesión era una tetraplejia incompleta. Y después de rehabilitación, constancia y esfuerzo tenaz (una de las motivaciones era precisamente conseguir que su abuela viera que no se iba a quedar postrado para siempre) consiguió primero moverse en silla de ruedas, después con muletas y finalmente moverse solo. Hoy Víctor Tasende, con 27 años, ha corrido ultramaratones, Ironmans, travesías en bicicleta por el desierto como la Titan Desert ... tan sólo una de ellas bastaría para realizarnos como deportistas y luchadores.
Víctor Tasende relata sus experiencias en un libro: "El segundo que cambió mi vida"